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Welcome to our publication platform! You can browse and search for stories and samples from all our writers. Thanks to our translators, each story is available in Czech, Dutch, Italian, Polish, Portuguese, Romanian, Serbian, Slovene and Spanish. Throughout the years, this platform is becoming a growing archive of European literature by the future generation of literary artists. We're sharing stories beyond barriers.

No den comida a los monos

Luz llevaba más de media hora esperando bajo el sol. De vez en cuando, re corría la acera de un extremo a otro para desentumecer las piernas y aliviar  el peso de la barriga. Sus ojos se movían con rapidez entre los coches que  circulaban por la avenida, especialmente cuando se oía un acelerón. Pero  nada.   Decidió refugiarse del calor bajo el alero del edificio. Fue entonces  cuando, detrás de un autobús, apareció zigzagueando el pequeño coche  rojo. Luz vio cómo Jaime frenaba en seco y se ponía a tocar el claxon repeti das veces, como si llevara un buen rato esperándola. Ella aguantó un poc...
Written in ES by Roberto Osa

El dilema del paraguas marrón La primera puerta a la derecha Nada

Había una vez, en la realidad, un paraguas marrón. Era ese tipo de paraguas  grande, con mango de madera, debajo del cual caben hasta dos personas.  Vivía en una heladería, en un rincón polvoriento. Dentro, se habían hecho  la casa unas cuantas arañas de patas largas. Una noche..., era una noche de  verano, el paraguas abrió los ojos y decidió: “Me voy”. El problema era que  el paraguas marrón no tenía piernas y no podía irse a ninguna parte por sí  solo. Alguien se lo tenía que llevar.   Al día siguiente, por la mañana, Carl abrió la heladería, como de  costumbre, y se sentó detrás del mostra...
Translated from RO to ES by Corina Oproae
Written in RO by Anna Kalimar

Pastel de tapioca

El rugir del motor de la furgoneta de la asociación anunciaba que ya era la hora de comer, en aquel día en que el sol ni se veía de tanto que quemaba. El viejo estaba debajo de la higuera; llevaba una camisa muy sucia, toda desabrochada, con una sonrisa irónica en la boca cerrada para sujetar el cigarro. Se quedó mirando cómo la brasileña —dos grandes manchas húmedas bajo los brazos y la espalda del uniforme igualmente empapada— salía del vehículo, cogía las fiambreras y se dirigía al anexo que funcionaba como cocina, donde él solía estar. —¡Tío João! ¡Tío João! La risa le hacía contraer to...
Translated from PT to ES by Sara De Albornoz Domínguez
Written in PT by Daniela Costa

El sol cuando cae (fragmentos)

La mañana del once de julio de 1978 sale un camión con una carga de pro pileno licuado en dirección a Barcelona. El camión proviene de una pe queña ciudad de Cataluña, y lo conduce un chófer con un abundante  bigote en medio de un rostro sonriente. Lleva veinte años conduciendo el  mismo vehículo para la misma empresa, de modo que se sabe de memoria  la red española de carreteras. Para evitar los peajes, siempre decide circular  por las carreteras del interior.  Las bombonas de gas no están pensadas para permanecer largo  tiempo al sol, y mucho menos un enorme depósito de gas cargado con  vein...
Translated from NL to ES by Irene de la Torre
Written in NL by Joost Oomen

Oda a la hermandad

Vi cómo Andrei se alejaba y entonces empecé a quererlo. Vi su mochila negra, abultada, que llevaba como un escudo a la espalda. La llevaba tan llena que era evidente que no estaba de camino, que no iba a ninguna parte. Si se adentrase así en las montañas, la mochila lo arrastraría hacia atrás, hacia el abismo. Las cremalleras estaban estropeadas, en cualquier momento podían soltarse y reventar, y yo me imaginaba que la mochila se desplegaba, como un airbag, un hinchable, cada vez más grande, como un paracaídas que tiraba de Andrei hacia arriba y lo llevaba allí donde debía estar. En primero d...
Translated from NL to ES by Carmen Clavero Fernández
Written in NL by Yelena Schmitz

El comunismo visto por los niños muy pequeños

Tengo cuatro años y no he subido nunca más allá del primer piso. Estoy  convencido de que la serpiente azul de la barandilla es interminable, de  que sube y sube y sube, de que hace estallar el techo de brea de nuestro  bloque de pisos y avanza invisible hacia el cielo. Es un pensamiento que   no cuento a nadie. El miedo se me calienta bajo la flama de este pensamiento.   La gente baja de los pisos superiores, desde el cielo, a veces hablan  en voz muy baja y yo no oigo lo que se dicen. Pero nunca hay un silencio  pactado entre ellos. Nunca hay tran-qui-li-dad. Los susurros flotan de uno  a ot...
Translated from RO to ES by Corina Oproae
Written in RO by Andrei Crăciun

Sin título

Tumbada de espaldas, en el suave confort de las sábanas, con la mirada fija en un punto invisible del techo de la habitación, Carlota se esforzaba por regular la respiración que se mantenía alterada desde que el sueño ansioso que estaba teniendo la despertó. Ya ni se acordaba de lo que estaba soñando realmente, solo recordaba la sensación desesperada de ese despertar abrupto en mitad de la noche. Y desde ese momento intentaba de todas las maneras posibles, pero sin éxito, bajar el ritmo cardiaco. Desistió, echó hacia atrás el cobertor y se levantó de la cama, no sin antes escuchar una queja en...
Translated from PT to ES by Sara De Albornoz Domínguez
Written in PT by Patrícia Patriarca

Cómo acabaremos siendo menos

1. En el salón, junto a un calendario, algunas fotos y la cuenta del restaurante en el que decidieron seguir juntos, hay colgada una lista con todos los animales y plantas en peligro de extinción: 3.079 y 2.655, respectivamente. Ella tiene la lista desde los trece años, y en aquella época, a falta de algo mejor, pegó trocitos de esparadrapo junto a los animales que más le apetecía ver. Él lo veía como un recuerdo de juventud y nunca se había parado a pensar que podrían acabar viajando en busca de animales y plantas amenazados de extinción.  Cada vez que añadían un animal a la lista lo comentab...
Translated from NL to ES by Guillermo Briz
Written in NL by Rebekka de Wit

Ni un instante Portasar

Allí Lucas es tan veloz que, si corre, las imágenes nuevas apenas si llegan a  tiempo de remplazar a las antiguas. El viento sopla silenciosamente pero  con eficacia, fricciones mínimas. Los huertos están rodeados de bosque  y dentro del bosque, a través del procedimiento del paseo, Lucas ha  encontrado un tilo muy grande, con las hojas blanquecinas por la parte  de atrás, con un hueco muy grande en la base. Dentro había arena seca y  sábanas para poder dormir cuando llueve y un frasco de mermelada. Allí  Lucas no echa nunca en falta números para sumar, multiplicar y dividir y  al final puede ...
Translated from RO to ES by Corina Oproae
Written in RO by Cătălin Pavel

El cambio

—Coja el ascensor, yo bajaré por la escalera —exclama el joven médico y corre escalera abajo, saltando los peldaños. No puede no llegar a tiempo. Unas semanas antes, la madre, todavía en el posparto, fue a ver al pediatra: el niño lloraba sin parar. Durante la primera visita le dijeron: —Dele de comer hasta que se quede bien lleno y se calmará. En el segundo ambulatorio le explicaron: —Solo es un cólico. Evite la comida frita. Le mejorará la leche y el niño dejará de chillar. El médico de la consulta privada simplemente se rio: —¿Y cómo no va a llorar? Si es un recién nacido. Los pedi...
Translated from PL to ES by Joanna Ostrowska
Written in PL by Joanna Gierak Onoszko

El Imperio romano en cien fechas

11 de septiembre. Después de una sangrienta batalla de más de tres días  de en el bosque de Teutoburgo, al norte de Alemania, tres legiones roma nas al mando del gobernador Publio Quintilio Varo se ven reducidas por  una coalición de pueblos germánicos liderada por Arminio, jefe de la tribu   de los queruscos. La noticia provoca una gran conmoción en Roma. Tras  la derrota, Augusto decide evacuar todos los territorios situados entre el  Rin y el Elba que, a partir del año 12. a. C., habían conquistado Druso y  Tiberio (hijos del primer matrimonio de su mujer, Livia, con Tiberio  Claudio Nerón)...
Translated from IT to ES by Paula Caballero
Written in IT by Fabio Guidetti

Los pequeños escritores

Casi todo lo que ocurrió ese día está aquí. Tengo el dedo índice apuntán dome a la cabeza. Muchos años después, mientras llevo a mi hijo a descu brir el hielo, aún recuerdo los acontecimientos de aquel único día como «el  fusilamiento».  Nadie murió. Las personas eran peligrosas, sobre todo los niños pe queños, colgados de los árboles. Sus pies se balanceaban, y era de su lengua,  de su propia boca, de donde saldrían los peores crímenes. Oír duele, caminar es un truco. Caminemos.  Hasta los pequeños dictadores envejecen. Los niños cohabitan la  tierra con los padres desde hace millones, quizás...
Translated from PT to ES by Lara Carrión
Written in PT by José Gardeazabal

Maniobra

Es finales de enero, un sábado, un año después de que abandonaras la arro cera en la casa que compartíais. Viertes el café en dos tazas y sacas las reba nadas de pan de la tostadora. La azucarera se encuentra en el penúltimo  estante del armario encima de los fogones. Cuando llegas a alcanzarla, tu  hombro hace un crujido asqueroso. Ella alza la vista de su teléfono, que está junto a sus gafas en la mesa del comedor. Colocas la azucarera sobre la  mesa, te disculpas y rompes a llorar en el cuarto de baño. Si respiras despa cio, el llanto casi no se oye. Apenas un eco. Un secreto que compartes ...
Translated from NL to ES by Irene de la Torre
Written in NL by Simone Atangana Bekono

Por fin tienes un cuarto para ti solo

Estoy incómodo, pero no me atrevo a moverme para no despertarte. Estiro  la espalda y se me pasa un poco el malestar. Estoy medio sentado en el  borde de la cama, dejando todo el colchón para ti. Tú estás sumido en un  profundo sueño y yo aprovecho para acariciarte el pelo con dulzura. No te  gusta que lo haga cuando estás despierto.  Solía desquitarme en el sofá. Poco antes de que te durmieras, acu nado por un día de juegos y carreras, te ponía a ver los dibujos animados.  Era entonces cuando te llenaba de mimos, que sólo aceptabas por encon trarte en un estado de semi consciencia. Te dejabas...
Translated from PT to ES by Lara Carrión
Written in PT by João Valente

La llegada

Las cosas se fueron de madre la mañana de un domingo de agosto, en la que los primeros transeúntes de la plaza Parvis de Notre-Dame, empleados que trabajaban en los bistrós de la zona, avistaron el objeto. Era algo parecido a una bala gigante colocada en el suelo, con la punta mirando hacia la catedral y la base hacia la Prefectura de Policía. A simple vista, el proyectil medía cerca de veinte metros de largo y cinco de diámetro. Los camareros y propietarios se acercaron con curiosidad, lo rodearon, se encogieron de hombros y se marcharon a abrir sus restaurantes. Esto ocurrió sobre las siete....
Translated from RO to ES by Luciana Moisa
Written in RO by Alexandru Potcoavă

Sín titulo

Mis dedos, toscos por el trabajo y la vejez, me arañan las mejillas cada vez que me seco estas lágrimas que no me abandonan. Estoy convencida de que el mar no tiene fin y no sé de dónde me nace tanto sufrimiento, si ya estoy muerta por dentro. ¿No habrá paz después de que todo termine? Nunca he visto el mar, pero sé cómo se hacen los caminos. Al agua nadie la atrapa, va siempre por donde quiere, pero yo sé encauzarla y sacar partido de esa tenacidad suya, antes de que se me vuelva a escapar y huya hacia los confines para llenar los vacíos de mi desconocimiento. Todavía no he llegado a vislumb...
Translated from PT to ES by Sara De Albornoz Domínguez
Written in PT by Daniela Costa

El retrato

La casa tenía una puerta de roble y una imponente fachada. No había ninguna placa con nombres. David tardaba un rato en bajar y yo observaba la calle. Era una calle tranquila y blanca, a diferencia del barrio junto al canal en el que vivíamos Sam y yo. Me debatía entre ensueño y resentimiento, como suelo hacer cuando me enfrento a cosas que no puedo permitirme. David abrió la puerta y me sonrió. Tenía la camisa abierta. Subí tras él por las escaleras y, una vez más, su aroma me cautivó; almendras y trementina. El estudio estaba tan desordenado como la última vez, pero parecía más despejado, ...
Translated from NL to ES by Carmen Clavero Fernández
Written in NL by Hannah Roels

Cátedra o cómo hacer nata montada

Algunas personas no sueñan cuando vuelan. Se hunden en su asiento de cuero sintético, se suben hasta la barbilla la manta gris de tejido polar, se ponen unos auriculares y dejan que el suave murmullo de una película de Eddy Murphy invada sus oídos. Algunos llegan a dormirse, pero no hay nada en ellos que produzca imágenes. Ninguna experiencia fantástica y asombrosa logra encontrar el camino a sus cerebros (que avanzan a gran velocidad aprisionados en sus cabezas dentro del avión). Su sueño es tan plano y estirado como la parte superior de las nubes.  Otros, por el contrario, sueñan mucho y ha...
Translated from NL to ES by Irene de la Torre
Written in NL by Joost Oomen

La depuradora

Llevaba un rato de pie delante de unas casetas de obra, frotándose las manos por el frío. A lo lejos, sobre el río, pasaron como un rayo dos cormoranes. Después se puso a mirar en todas direcciones y a revisar un SMS llegado el día anterior. «Hola, Petra. Operación depuradora mañana a las 8. Encuentro en el puente delante de los módulos. A.» Lo leyó tres veces más hasta que se apagó la pantalla. La depuradora vieja y la nueva, que se repartían todos los residuos que vertía la ciudad, se alzaban una tras otra sobre la isla, como las dueñas y señoras del río. Mientras que la vieja se elevaba co...
Translated from CZ to ES by Daniel Ordóñez Franco
Written in CZ by Anna Háblová

Todo irá bien

Se lleva su máquina de café. No sabe quién es, pero al menos sabe que es una mujer con una cafetera expreso superautomática De'Longhi Magnífica S ECAM 20.110.B. Negra y gris. Como ya no sabe nada, todo detalle importa. Cada mañana, la máquina muele los granos de café haciendo un ruido terrible que la despierta al instante, a ella y a sus vecinos. La compró de oferta en la web Coolblue y, durante cuatro días, esperó su llegada junto a la ventana, actualizando cada cinco minutos la página de seguimiento del pedido. Luego empezó a actualizar también su Twitter porque, Dios, cómo ansiaba un c...
Translated from NL to ES by Carmen Clavero Fernández
Written in NL by Aya Sabi